El camino hacia el disenso es claro: Impacto de la corrupción romana, indignación por el mercadeo de las indulgencias, - operación financiera del Vaticano para la construcción de la basílica romana. Reacción por la tiranía mental y política del Vaticano y de sus funcionarios. Descrédito total del conjunto y en concreto de su AUTORITARISMO que no se detiene ni ante el crimen, ni ante el genocidio.

Roma, aparte de autoritaria, se presenta con todo su orgullo que no indaga, ni tan siquiera discute principios teológicos, sólo exige obediencia. Roma fomenta la alienación del cristiano, su mínima formación humana y escriturística. Su alejamiento de los textos sagrados. Y la sumisión a la explotación económica.

Aparece, también, en el film la reacción político-nacionalista. El Emperador –Carlos V, que saqueó la Roma de los papas- quiere mantener la unión de Alemania con Roma. Los Príncipes electores, con poder tangible, apoyan a Lutero y a sus múltiples seguidores que quieren una Iglesia alemana y que sus dineros no vayan a Roma ni comprando indulgencias y menos como tributo. El Vaticano, tal vez, desde ese momento apoya todos los nacionalismos, en cualquier parte del mundo, excepto en la unificación italiana.

Parece imposible que tras el escándalo de la venta de indulgencias siguiera en la doctrina vaticana, hasta nuestros días, la consideración de ellas como disminución de la permanencia en el purgatorio. ¿Qué es el purgatorio? ¿En que Evangelio se apoya esa doctrina? ¿Quién se la inventó? Para vergüenza del mundo cristiano ha sido un negocio vergonzoso para los eclesiásticos, siempre ávidos de riquezas. Visto lo visto hubiera sido oportuno que el Vaticano, recogiendo el impacto luterano hubiera olvidado todo lo referente a las dichosas indulgencias.

Tampoco el Vaticano aprendió la debilidad intelectual del celibato impuesto. Y es un problema enquistado que requiere su pronta eliminación. Junto con otra visión del sexo percibimos en el luterano otra alegría por la vida. Sin tantos miedos, ni sumisión.

Pero lo más impactante del luteranismo es su reconocimiento a la libertad del hombre, su respeto a sus posibilidades intelectuales y a la iluminación del Espíritu en la libre interpretación de las Escrituras.

Fue definitivo la traducción de Lutero del Nuevo Testamento y después de la Biblia entera. Obra impresionante para los medios de la época y de enorme valía literaria que le ha otorgado el ser el libro más clásico de la literatura germánica. La gramática y sintaxis del latinista Lutero han pasado a ser las de la lengua alemana.

La reacción vaticana ante la Reforma Protestante se llamó Concilio de Trento. Fue, en todo, una reafirmación de las doctrinas más rancias del Vaticano referente al Papado, a las indulgencias, al celibato, al purgatorio y a todo lo que sea estricto derecho canónico.