Lugar de Encuentro de lo sagrado y lo profano

Preposiciones

26-Diciembre-2007    Imanol Zubero

—————————————

En las últimas semanas las preposiciones se han convertido en las protagonistas del discurso político. Como es sabido, las preposiciones son palabras que se emplean en la formación de las oraciones para relacionar las ideas componentes de la misma. Carecen de significación léxica por sí mismas, pero sí poseen un significado nocional situacional, siendo fundamentales para dar sentido a las oraciones al relacionar distintos elementos lingüísticos. Sin embargo, estas partículas aparentemente ayunas de significado han centrado en gran manera los principales debates políticos.

El primero en hacer girar la ruleta de las preposiciones fue el obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, con la publicación de su libro ‘Un obispo ante ETA’. Preguntado en alguna entrevista por las razones que le habían llevado a utilizar para titular su libro la preposición ‘ante’ y no términos como ‘frente’ o ‘contra’, Setién respondía así: «Sencillamente, porque yo no vine en 1972 al obispado de San Sebastián para ser un obispo contra ETA. Vine sabiendo que ETA estaba aquí y que tenía que situarme ante ETA».

Desarrollando esa cuestión, en otro momento añadía que mediante el uso de esa preposición buscaba «evitar el equívoco» de que podamos creer que lo único que tiene que decir del asunto «es que estoy en contra de ETA». Como cabía esperar, estas y otras declaraciones han provocado una vivísima discusión. En todo caso, seguimos sin saber qué persona habita tras el personaje de Setién. Un escurridizo hermetismo que conecta mal con el espíritu testimonial y misionero del Evangelio.

Días más tarde era el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, quien volvía a poner las preposiciones en el ojo del huracán cuando, al anunciar la apertura de una ronda de contactos con partidos políticos y agentes sociales, afirmaba que la sociedad vasca debe avanzar «con o sin ETA». Hay quienes han visto en este anuncio, hecho precisamente en un momento en que la violencia vuelve a rebrotar, una proposición deshonesta. Tal vez lo cuestionable no sea la proposición en sí, sino las preposiciones utilizadas. Aunque, por otra parte, lo cierto es que con o sin ETA la sociedad vasca no ha dejado nunca de avanzar en muchas cosas (ni de retroceder en otras).

Por último, el tribunal de la Audiencia Nacional que ha juzgado el ‘caso Ekin’ ha estrujado el repertorio de preposiciones a la hora de presentar los fundamentos de su sentencia. Y así, algunos de los condenados lo han sido en calidad de dirigentes de una organización terrorista: por estar sobre o tras ETA. Otros por pertenencia a banda armada: por estar en ETA. Pero también los ha habido que han sido condenados por estar con, bajo o junto a ETA, cuando no por actuar desde, entre, hacia, por o según la organización terrorista. Demasiadas preposiciones juntas y revueltas. Aunque su función sea relacionar, las preposiciones por sí solas no pueden sustituir a los hechos fundados. No es extraño que el desconcierto campe a sus anchas y que las convicciones puedan acabar confundidas con las ganas.

Curiosas preposiciones. Vacías de significación léxica, pero llenas hasta rebosar de significación política cuando se relacionan con un término como ETA, al que nunca deberíamos dejar de anteponer la preposición ‘contra’.

Haz hoy mismo tu APORTACIÓN (Pinchar aquí)

Escriba su comentario

Identificarse preferentemente con nombre y apellido(s). Se acepta un nick pero con dirección de e-mail válida.

Emplear un lenguaje correcto, respetar a los demás, centrarse en el tema y, en todo caso, aceptar las decisiones del moderador