Los que somos de clase trabajadora y proletaria, asistimos asustados a las “bajas” que se producen a nuestro alrededor. Lo pobres obreros que se quedan abocados a la marginalidad, cuando se quedan sin trabajo. Como hoy todos o casi todos estamos endeudados con los bancos, la tragedia es mayor.

Tengo presente el caso de un matrimonio con un hijo, que se han quedado los dos en paro, después de meses sin cobrar el sueldo, con deudas, y además sin poder cobrar el subsidio de desempleo. Si alguna alma caritativa lee estas líneas y puede y quiere ayudarles, que me escriba, mi dirección es –metsu1@telefonica.net-, los pondría en contacto. Yo no puedo más que horrorizarme de su tragedia, lo que necesitan es dinero, que no tengo. Lo pobres estamos siempre al borde de la tragedia. Todos tenemos duelos, pero “los duelos con pan son menos”.

Los capitanes políticos, si realmente fuesen líderes del pueblo, lo último que harían en esta circunstancia que nos toca vivir, es irse de vacaciones. Ya se que hoy puede hacerse mucho desde cualquier lugar. Pero aunque sea solo por un gesto solidario, deberían estar al pie del cañón.

Cuando ocurre un atentado de ETA, cuando hay muertos en un incendio, etcétera, allá van, y muchos para hacerse la foto, y nada más.

Pues se deberían “retratar” siendo los últimos que abandonaran el barco que se hunde, como los antiguos capitanes de navío.

Debe ser descorazonador para los parados, el ver en los medios, la gente de vacaciones, desde el rey su familia el presidente de gobierno, el jefe de la oposición, hasta el ultimo famoso de la tele basura. Ellos, al no estar de vacaciones, no aparecen…, son bajas del sistema, números negativos que molestan. Pero están vivos como nosotros, y no se dejaran morir…

ESTÁ OCURRIENDO Y MUCHO, señores. Por más que intentemos ignorarlo, siguiendo quien puede, con su vida, y mirando para otro lado. Es una gran tragedia la que tenemos encima. PARADOS SOMOS TODOS.

Cuando el las ciudades vemos un pobre pidiendo, le demos limosna o no. Se nos suele encoger el corazón. Pues abocados a pedir en la calle hoy existen millones de compatriotas nuestros. ¿Cómo no nos sacude esto…?

Fidel Castro, hoy no es santo de mi devoción (aunque lo fue…). Pero Fidel, acudía a cortar caña junto con el pueblo. Eso es lo que pido. Que los parados sientan que “cortamos caña” con ellos.

Si no es por la vía de las leyes y el Estado. QUE LO SEA POR LA VIA DE LA SOLIDARIDAD POPULAR.

Si queremos habrá solidaridad y por lo tanto, paz. Y depende de nuestro comportamiento colectivo, habrá algo muy negro que no quiero definir para que no me llamen agorero. Pero podéis deducir…
Es la hora de los auténticos líderes populares. Los que encarnen los valores del pueblo, y sean los últimos en salvarse.

Es patético el proceder de nuestros políticos -globales-. Intentan apuntalar lo que teníamos hasta ahora. O sea, resolver un problema con los mismos métodos que han fracasado. Es tener muy poca visión de estadista, quien así procede.

Se hunde en España y en el mundo, el modelo económico, no hay reemplazo a corto plazo. Lo propio es organizar el socorro para los muertos del sistema, que están bien vivos y tienen hijos. Y comenzar a caminar por la buena senda, que no es la del “desarrollo” sin límite, sino la del desarrollo del humano. Así, consumiendo poco, y repartiendo bien, saldremos adelante. Y cuando encontremos oposición para este proceder que propongo. La Fuerza Publica debe reprimir a los antisociales. Sean ricos o pobres.

A grandes males, grandes remedios. Confío como A. Machado, un milagro se la primavera.
Si nos ponemos en camino de verdad y colectivamente, creo sinceramente que el milagro se puede producir. “Dios aprieta pero no ahoga”.

Aquí quiero confesar un sentimiento que hasta poco he tenido. Cuando caían las primeras empresas, y la tragedia no tenía cara y ojos. No podía reprimir en mí, un sentimiento de alegría. Odio visceralmente el viejo orden, este que se está hundiendo. Igual que me entusiasma el NUEVO ORDEN.

Aprendemos de las evidencias. Hoy es evidente que nos hemos de salvar juntos, o perecemos. Y creo que lastimosamente en el futuro próximo, aún será más evidente…
Los políticos que hemos elegido, tiene la responsabilidad de organizar la resistencia al gran desastre, y si no se ven capaces, que dimitan, otros mejores habrá. Pero hacen falta GRANDES REMEDIOS y hace falta trabajar incluso renunciando a las vacaciones. Hacen falta estadistas con profundidad humana. No arrivistas frívolos y ruines, que se erigen como “salvadores” nuestros, y comienzan por proponer “reestructurar el mundo laboral”, cuando todos sabemos que quieren decir con esto.

Las derechas en este país la solución que dan es: que paguemos el desastre de la crisis el pueblo, como siempre ha pagado todo desastre. Para continuar como hasta ahora. Y además… los parados. Que se pudran.
Necios, que no saben que de esta manera, hoy, fomentan… su propio desastre…

Pero contentos todos… Porque entre todos pagamos fichajes de vértigo en millones de euros, a futbolistas que hacemos dioses. “Pan y circo”. Pero nos comienza a fallar el suministro de pan, y sin pan, el circo será un rictus amargo en nuestro semblante.

Los trabajadores hemos de tener presente, que los políticos, sin respaldo popular, pueden hacer muy poco. Exigencia y colaboración con estos políticos. Y…, marchemos, que no se acaba el mundo… Si nosotros nos empeñamos, en que no se acabe…
SOLIDARIDAD CON LOS PARADOS